miércoles, 26 de septiembre de 2007

Oberheim OB-12

Pese a que una gran mayoría de usuarios han tachado a este sintetizador de ser una pobre imitación de los clásicos creados por Oberheim Electronics en los 70 y los 80, otros muchos, entre los que yo me sumo, han elogiado la calidad de esta bestia azul.


Una de las razones que argumentan quienes se muestran en contrar de este aparato es que no se trata de un verdadero Oberheim pues parece que nadie de los que trabajaba en esa casa estuvo involucrado en su creación. Y es que Tom Oberheim (fundador de la marca y creador de numerosos avances en el campo) abandonó su empresa en 1986 para pasar esta a manos de Gibson y posteriormente a una empresa italiana llamada Viscount especializada en la fabricación de órganos. Viscount es quien finalmente fabricó y sacó a la venta en 1999 este sintetizador de modelado físico haciéndo uso del nombre Oberheim (bajo licencia otorgada por Gibson), posiblemente para maximizar su difusión. En cualquier caso, y pese a que posiblemente la síntesis no fuera el lado fuerte de Viscount, el resultado es bastante impresionante.


Con un aspecto imponente y un acabado de calidad, este artefacto de casi 15 kilos de metal azul ofrece un buen montón de extras que, para su época, resultaban de lo más innovadores, como por ejemplo su enorme display gráfico o una salida digital SPDIF. El control que ofrece es grandioso por disponer de un buen número de knobs, faders y botones que permiten una edición de lo más flexible y que, a su vez, se ve reflejada en tiempo real en la pantalla LCD muchas veces a nivel gráfico, con lo que también se ha apuntado a que este sintetizador era ideal para aprender.


Sin embargo adentrémonos en lo verdaderamente importante: el sonido.
Pese a venir cargado con muchos presets que resultan poco atractivos de entrada, la mayoría de ellos son fácilmente mejorables con un poco de edición, otros con un poco de paciencia y otros son tan espectaculares que manipularlos debería ser un delito. También hay sonidos que sencillamente son inútiles y muy malos, pero de eso hay en todos los aparatos que han caido en mis manos, y es algo que mayormente depende de la utilidad que le aporten a cada uno. En mi caso, por ejemplo, instrumentos que contengan sonidos imitando trompetas, guitarras o gaitas me son completamente prescindibles. Siendo en este caso un sintetizador analogico virtual, el rango de posibilidades me resulta más práctico, sobretodo para crear pads, leads o sonidos extraños, y en ese campo el OB-12 se desenvuelve con soltura. Otra facilidad que ofrece es el grosor y la limpieza en sus sonidos. Resulta fácil obtener pads densos y muy cálidos, y también bajos bastante bestias.


En cuanto a especificaciones: teclado de 4 octavas con 12 voces de polifonía en 4 partes, 256 programas y 256 presets a repartir entre dos osciladores (que pueden tomar hasta tres ondas simultaneamente: saw, triangle y square), ruido, modulación en anillo y también de FM para el segundo oscilador. Dispone de 4 efectos (aplicables simultaneamente) Overdrive, Chorus, Delay y Reverb y también cuenta con un ecualizador de hasta 5 bandas. Además cuenta con dos LFO y dos filtros de tres tipos Lowpass, Hipass, Bandpass
configurables en serie o paralelo. Por último mencionar la presencia de un pequeño grabador de frases de 196 secuencias o 16000 notas y una función de morphing entre presets que se puede asociar a la rueda de modulación o al controlador ribbon.


En resumen, y para terminar con este análisis previo, el Oberheim OB-12 se me antoja un sintetizador de lo más versatil para su rango, tanto por la calidad de su sonido como por la flexibilidad a la hora de editarlos. Me gusta el tacto del teclado y su aspecto retro con tantos controles y ese azul que no le permite pasar desapercibido en ningún estudio o actuación. Todo esto sin olvidar que ya tiene sus casi 8 años y que en sus últimos días en tienda rondaba los 800 euros. Hoy en día es posible encontrarlo en el mercado de segunda mano entorno a los 500 euros.




jueves, 13 de septiembre de 2007

Creamware Pro-12

Ahora que todo el mundo se conmueve con el nuevo Prophet 8 de Dave Smith, y pese a existir por ahi emulaciones para ordenador como el Pro 53 de Native Instruments o el Prophet V de Arturia, yo he optado por la firma alemana Creamware para adquirir mi versión del mítico Prophet V , una versión en rack y digital (el de Dave Smith es analógico) que, al parecer no desmerece en absoluto al original.


Última adquisición (vía Hispasonic), llegado hace un par de días. Doce voces (en lugar de 5), un pequeño conjunto de multiefectos y conexión USB se cuentan entre sus ventajas más destacables frente al original, y como podéis observar por las fotografías que le hice a mediodía, el panel es bastante similar al original, donde cada opción tiene un control dedicado.


Del sonido poco puedo decir todavía dado que apenas he tenido tiempo para meterle mano. Por otra parte, a nivel comparativo nunca he tenido la oportunidad de escuchar un Prophet 5 en otro sitio que no fuera un disco o un directo, pero según los expertos de la revista Sound on Sound parece una más que respetable emulación como se extrae de este artículo

En cuanto a sus especificaciones:

  • Número de voces: 12
  • Resolución: 32 bits
  • Samples internos: 44,1 kHz
  • Salidas: 2 x 1/4 inch (6,3mm) sin balancear
  • Entradas: 2 x 1/4 inch (6,3mm) sin balancear
  • MIDI: In, Out, Thru
  • USB: USB rev 1.1
  • Dimensiones: 480mm (ancho) x 209mm (prof) x 40/76mm (alto)
  • Peso: 3.4 kg

Pronto publicaré algunas muestras grabas por mi mismo. Por lo pronto podéis abrir boca con las que se encuentran en la página oficial de ASB-Creamware



sábado, 8 de septiembre de 2007

Los sonidos de Jean Michel Jarre

Radek Tymecki en un joven músico polaco de quien recientemente he podido ver un par de videos en la red en los que no solo demuestra ser un gran fan de Jean Michel Jarre, sino que demás ha sido capaz de sacar muchos de los sonidos de este con algunos de los sintetizadores que posee.




En este primer video pueden apreciarse los sonidos que obtiene utilizando un Roland D-50, mítico sintetizador de finales de los 80 que, al parecer, Jarre utilizó exhaustivamente en sus álbumes Revolutions y Waiting for Cousteau. Además, nuestro amigo Radek se atreve a programar también sonidos empleados álbumes anteriores como Rendez Vous o Magentic Fields.



En este video podemos ver un Eminent 310 Unique un órgano/sintetizador de principios de los 70. Este aparato fue utilizado por Jarre hasta el punto de casi convertirse en su voz principal a lo largo de muchos de sus discos. Tal como vemos en el video, Radek nos demuestra lo sencillo que parece interpretar temas de las obras Oxygene y Equinoxe gracias a ese particular sonido que todos los amantes de la música de Jarre tan fácilmente podemos reconocer.

Este extraño órgano fue fabricado por la prestigiosa empresa holandesa Eminent en Bodegraven, que además construyeron el famoso Solina String-Ensemble. Al parecer no es nada fácil encontrar un bicho como este a estas alturas, ni tampoco parece haber demasiada información sobre él, sin embargo aquí dejo algunos enlaces por si queréis profundizar más en este magestuoso instrumento:

Eminent 310 Unique salvation Proyect
Artículo en Sound on Sound
Perkristian.net studio

Podéis encontrar otros videos de Radek Tymecki en su espacio de YouTube aquí.